Día 33: desde MO I RANA (Noruega) a TRONDHEIM (Noruega)


Aquella mañana nos levantamos los tres con aires renovados, nos hacía mucha falta una cura de sueño. El cielo seguía cubierto de nubes, pero al menos había dejado de llover. El GPS nos ayudó a encontrar de nuevo la carretera E6 por la que habíamos llegado hasta Mo i Rana y que ahora debíamos seguir hacia el sur. 

Poco a poco las grandes montañas fueron dando paso a cumbres menos elevadas y a enormes bosques de coníferas, pero el paisaje seguía siendo espectacular; allá donde miraras siempre había un lago, un fiordo o una cascada, el agua nos acompañaba otra vez, aunque por suerte esta vez no caía del cielo.

NORUEGA
NORUEGA

Fue un largo día de viaje, pero realmente placentero: buen clima, buena carretera y grandes paisajes, la cámara no podía atrapar del todo la gran variedad de colores que nos rodeaba, pero aún así lanzamos decenas de fotos.



Encontramos un cartel en la carretera que ponía Laksfossen y como para entonces ya sabíamos que fossen en noruego era cascada y como nos encantan las cascadas, tomamos el siguiente desvío sin pensarlo un segundo. 

El salto de agua, aunque no es muy alto, si que nos impresionó por la cantidad de agua que traía el río.

GASOLINERA
COMIENDO EN LA GASOLINERA
La hora de comer nos pilló en mitad de la nada y tras buscar sin éxito algún supermercado en las aldeas cercanas, al final paramos en una gasolinera a comer unos perritos calientes.

Es habitual en los países del norte de Europa que todas las gasolineras tengan también un pequeño restaurante de comida rápida y la de aquel día además disponía de una pequeña terraza junto al río, así que nuestro humilde almuerzo se convirtió en un lujo.




LLANURAS NORUEGA
NORUEGA
A medida que nos aproximábamos a nuestro destino la orografía fue allanándose, pero el verde seguía siendo el color predominante, por un momento sentimos que estábamos en Cantabria, camino de Villacarriedo para comer donde Fonso.


TELEPEAJE NORUEGA
Antes de entrar en Trodheim, aparecieron los arcos de los peajes de la ciudad. Creo que no lo habíamos comentado antes, en algunas zonas de Noruega, sobre todo en las entradas a las ciudades, hay un sistema de telepeaje que capta la matrícula de los coches que circulan por la carretera, similar por ejemplo al de las autopistas de Portugal.

El pago se puede realizar en algunas gasolineras o registrándose en Internet. Si no lo haces, el gobierno noruego se encarga de enviarte la factura a tu domicilio, aunque vivas en España...

Llegamos al hotel a media tarde, estaba situado en una especie de isla donde está la estación de tren y comunicado con el resto de la ciudad por puentes. Como ya éramos expertos en el arte de del check-in y en el oficio de maleteros, nos instalamos en un suspiro y salimos a conocer la ciudad.

LLUVIA TRONDHEIM
LLUVIA EN TRONDHEIM
Aunque la tarde había ido empeorando, nos hicimos los valientes y nos sentamos en una terraza de una calle peatonal a cenar. Menos mal que teníamos toldo, porque de repente se puso a caer el diluvio universal y tuvimos que esperar a que escampara. Por suerte, no duró más de quince minutos y pudimos seguir paseando sin paraguas el resto de la tarde.




Trodheim, como muchas ciudades de Noruega, nos pareció un lugar tranquilo, con pocos vehículos y perfectamente organizado; ideal para vivir si obviásemos el clima.

Mención aparte merecen las preciosas vistas del río Nidelva desde el Gamle Bybro, que no por ser mundialmente conocidas, dejan de impresionar cuando las ves en persona.

TRONDHEIM
TRONDHEIM

GAMLE BYBRO TRONDHEIM
GAMLE BYBRO



TRONDHEIM
ATARDECER EN TRONDHEIM


Un precioso atardecer de color naranja intenso nos acompañó en el camino de vuelta al hotel dejándonos una colección de imágenes para el recuerdo.



ATARDECER EN TRONDHEIM